A veces, en algún momento de nuestro camino, la angostura y las espinas se superan mudando de piel. Es un proceso lento y doloroso, pero no nos queda otra...
El águila, en la mitad de su vida, se somete a un proceso de renovación extremadamente doloroso del que sale fortalecida cual "ave fénix", si no lo hiciera, sencillamente, moriría...
Hola Mercedes,
ResponderEliminarEn este haiku cada palabra tiene su sentido preciso. Ni sobra ni falta ninguna. Me parece muy bueno.
Un abrazo
Elsa
A veces, en algún momento de nuestro camino, la angostura y las espinas se superan mudando de piel. Es un proceso lento y doloroso, pero no nos queda otra...
ResponderEliminarEl águila, en la mitad de su vida, se somete a un proceso de renovación extremadamente doloroso del que sale fortalecida cual "ave fénix", si no lo hiciera, sencillamente, moriría...
¡La foto es preciosa, Mercedes!
Un fuerte abrazo, amiga.