Juan Carlos, efectivamente es una espiguita de Aýna.. el río Mundo discurría por el cortado y por allí anduvimos entre huertos y chicharras... Una maravilla. Gracias por tus palabras.
Susana.... jejejeje... la cuesta tenía su aquel, no creas que me extraña que no te animaras. Mira, por lo menos, esto que te puedo regalar. Me alegro haberte llevado hasta allí sin demasiado sufrimiento!! jajajajajajaaj!!!
¡Muy buen momento, Mercedes!
ResponderEliminarSe respira ese ambiente estival: sonido, viento, río...
¿Quizás una espiga reciente de Aýna?
Gracias. Un abrazo.
Muy bella imagen. Siento no haberos acompañado en el paseo, pero tú me has acercado al río con tu haiku. Besos,
ResponderEliminarJuan Carlos, efectivamente es una espiguita de Aýna.. el río Mundo discurría por el cortado y por allí anduvimos entre huertos y chicharras... Una maravilla. Gracias por tus palabras.
ResponderEliminarSusana.... jejejeje... la cuesta tenía su aquel, no creas que me extraña que no te animaras. Mira, por lo menos, esto que te puedo regalar. Me alegro haberte llevado hasta allí sin demasiado sufrimiento!! jajajajajajaaj!!!
Un abrazo y gracias.