Supe de esta mujer de mirada acuosa (que tanto me recuerda a una gran amiga que pasó a mejor vida no hace mucho) a través del haiku, concretamente a través del libro"El monje desnudo. 100 haikus" de Ed. Miraguano, traducidos por V. Haya, y en el que a modo de separata Chantal nos habla de su visión del haiku y de Santôka. En la magnifica entrevista que concede a El Español, se asoma discretamente, entre luces y sombras, para dejarnos ver un pedacito de su alma. Me ha encantado. Os la recomiendo.
Chantal Maillard: "La violencia de Estado nunca está justificada"
"El capitalismo nunca fue una buena opción: yo optaría más bien por una nueva economía de subsistencia" / "Las guerras empiezan por menos de lo que pasa en Cataluña" / "Tenemos buen cuidado en mantener la insatisfacción necesaria para sostener la sociedad de consumo".
Lo advierte en uno de sus poemas: "¡Me atrevo a creer en las ruinas!". En otro cuenta que está "creciendo de la nada". Parte de cero, Chantal Maillard, en cada construcción intelectual; se arranca del mundo y luego se instala con rostro nuevo, más lúcida y poderosa, más volátil y desencantada, pero con memoria de la caída. La llaman la "poeta del dolor", y es mirarla y ya duele. Con los ojos clarísimos y los dedos en las sienes, pariendo ideas. Le molesta el ruido del ambiente, los pasos cercanos de tacones, las voces que cuchichean. Maillard ama el silencio porque sabe que el silencio es una postura. Porque sabe que el silencio es elocuente.
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