atrás queda el río…
sobrevolando la aldea
una garza real
campo baldío
cubierto de escarcha…
piar de lavandera
luna de día…
junto al camino del templo
verdea el trigo
fluye ladera abajo
la brisa del atardecer,
llovizna…
el sabor amargo
de la última almendra…
bignonia en flor
ribazo de brezos…
velada por la niebla
la torre vigía
un viento frío…
las campanas que suenan
son por mi padre
tierra arada;
las huellas de los jabatos
llenas de lluvia
halo de luna…
sobre el Budha de piedra
florece el musgo
alba lluviosa…
junto al tomillo blanco
un sapo de huerta
senda del templo;
tras la niebla la luz
de las lamparillas…
brisa en las cañas…
los revuelos azules
de una libélula
agua serena…
entre los brotes de juncos
una camada de patos
solo una noche,
ha dormido en el río
la cigüeñuela
crepita el fuego…
el abuelo canturrea
desgranando maíz
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